Miramar, enero 2006
El mar tiene, hoy, un dìa de cien azules.
Zafiro, aguamarina, turquesa,
mármoles verdes y ònix,
òpalo,
y ònice.
El mar tiene cien azules,
e incontables soledades me acompañan.
Y me acaricia èl, en su vaivèn,
inconmensurable y profundo,
¿ Cuàndo lo amarè en su dulce lecho,
arrullada de oleajes y murmullos?
El cielo existe en las olas,
con topacios, entreverado.
Y alabastro, fugaz, la espuma,
perlas, encaje y plata,
filigranados.
El mar trae cien azules,
quiero ser viento que vuela lejos,
volar rauda, veloz, sin pensamientos,
libre y solitaria para recorrerlo.
El mar calla cien azules,
pero sus olas entonan valientes canciones.
Quiero cantar con ellas para siempre,
sin recuerdos, sin desolación,
sin amores.
La Finita
This poem has not been translated into any other language yet.
I would like to translate this poem
The infinite beauties of the shades of blue. The day I first seen the sea I was in awe as I was intimidated by it's gargantuan force. The Spanish language really colors this precisely.