Sobre la pantalla de sus ojos, puedo leer
Mucho bellos poemas. Linda, me atreví a escribir,
Para reanimar, venerar, y honrarte.
Me gusta la suavidad incomparable de su sonrisa,
La gelatina de sus labios, la blancura de sus dientes,
Y el aliento que anuncia la llegada de la primavera.
Los brotes comienzan a aparecer. Los gansos,
Borrachos por el invierno, cantan con una voz
De felicidad, de exasperación y de alegría.
Sobre la pantalla de sus ojos sobresalen destellos,
Y miríadas de nubes. Corazón, ahí, puedo leer
Poemas que pueden inflamar su bella sonrisa.