Un día miramos
con más hambre
la corteza de un árbol
y el olor de la gasolina
es un buen olor
Y no nos molesta
la economía de las monedas
vivimos un momento
infinito
cuando descubrimos
inapelablemente
que nos vamos a morir
Entramos al cine
con el plan de arañarle
los muslos a la amiga
y sucede
que lo que vemos en el lienzo
nos hace llorar a los dos
Se encienden las primeras luces
Banco de Londres Chicles Clark
National City Bank
detrás de la cortina
el hombre y la mujer se miran
y se ponen la última prenda
Hay cara de fin en cada cosa
cuando se encienden las primeras luces
El gamín irrumpe de pronto
por la puerta del bus
acosado como un ladrón
ofrece un rápido espectáculo
recoge unas monedas
y escondiendo el botín
en su chaqueta
escapa como un perro apaleado
cuando la lava del día
nos cubre
nos queda algo de su voz amigdalina
y un pedazo de su canción
El tren avanza fatigado
como una tortuga
respirando humo y carbón
el tren será chatarra
todo será polvo y chatarra
No me digan que vivir está mal
aunque algo nos venga
desde el fondo
No todos saben
lo que pasa en el día
estar vivo es una cita
frente a un mantel a cuadros
o decir vamos a la esquina
de los cacahuetes
Es bueno sentarse a la sombra
en verano
a oír el martilleo de los latoneros
que trabajan sobre las barracas
a lo lejos
Vivir está muy bien
pues no hay nada más bello
que un obrero mezclando cemento
una grúa en la tarde
o una puta joven
elástica
lavándose la boca
y soñando en su pueblo
perdido entre los valles
azules y balsámicos
O el viejo que va despacio
calle abajo
deteniéndose a menudo
y que lleva unidos por una cuerda
un sartal de peces rojo-dorados
y la tarde hinchada de pitos y de pájaros
y un recuerdo
con olor a tabaco y madera
This poem has not been translated into any other language yet.
I would like to translate this poem